domingo, 26 de mayo de 2013

Mi cita con una madurita

Cuando entro al bar la vi, podría ser perfectamente mi madre por la edad. Su rostro era precioso, unas largas piernas y un cuerpo esbelto. En aquel momento me pregunte que podía pretender con aquella mujer, ella me miró y yo le sonreí, sonrisa que ella también me devolvió.
Me senté en su mesa descaradamente y empezamos a hablar, paso casi una hora y yo la invité a pasear, hacia una noche preciosa, ella acepto,  caminamos por el parque durante un largo rato, ella era divina con aquella carita de ángel...
Después del paseo la invite a tomar una última copa a casa, mis padres estaban fuera y no volverían en todo el fin de semana, ella dijo que estaba loco, pero acabo aceptando la invitación.
Cuando llegamos, ella aprovecho para ir al baño y yo aproveche para poner música y bajar un poco la luz de la sala, cuando volvió yo la esperaba con una copa de champagne...

Comenzamos a bailar, yo la cogí de la cintura y la apreté hacia mí, a ella le gusto y me pidió que la apretara más fuerte, yo lo hice a la vez que la iba acariciando... Yo me estaba volviendo loco... En aquel momento ella me dio un beso en los labios, comenzamos a quitarnos la ropa el uno al otro mientras nuestros cuerpos bailaban al ritmo de la música, hasta quedarnos en ropa interior, mientras nuestras lenguas desaparecían en nuestras bocas en besos profundos y pornográficos.
Nos acabamos de desnudar y seguimos bailando hasta finalmente acabar tumbados en la alfombra del salón. Comenzó a chuparme hasta llegar a mi miembro, se metió mis 23 centímetros de pene en su boca, el placer que yo sentí en ese momento era inexplicable, luego se puso de costado invitándome a  que la penetrara... Intente penetrarla pero me costaba un poco, nunca me hubiera imaginado que una mujer así, tuviera aquella vagina tan estrecha, ella me decía al oído que se la metiera, quería notar todo mi pene dentro de ella....
Se lo fue metiendo y sacando poco a poco, cuando lo tenía dentro su vagina apretaba mi pene... qué locura!!

Ella gemía y gritaba, al tiempo que me pedía que se lo metiera todo, yo cada vez empujaba mas y mas, hasta metérselo todo hasta el fondo...acabamos los dos enloquecidos de placer, esa noche echamos tres polvos como nunca antes lo había echo, esa noche ni su trasero se salvo de probar mi pene...
Cuando marcho me dijo la edad que tenia y había 25 años de diferencia entre nosotros,  pero aquella noche la edad no tuvo nada que ver entre nosotros, fue una noche maravillosa.
Nunca más la volví a ver, pero sigo volviendo a aquel bar donde la conocí, con las esperanzas de volverla a encontrar algún día....

3 comentarios:

  1. Hace un par de meses tuve una experiencia similar con una madurita que me sacaba 19 años. Me he sentido totalmente identificado con el relato. Y por supuesto, me ha encantado la foto. Sanda, como siempre, levantando pasiones!!

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  2. Lady Sandra… excelsa mujer ;)

    Besos.

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  3. Muchísimas gracias chicos +Tloque Nahuaque y +Beau Brummel...por vuestros comentarios.
    Me gusta saber que en algunos de mis relatos mas de uno os sentís identificados en ellos...
    Un besito

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